El sustrato es uno de los factores más importantes a tener en cuenta a la hora de cultivar plantas en jardines o macetas. Es el medio que proporciona a las raíces todo lo que necesitan para crecer y desarrollarse, como nutrientes, agua y oxígeno. Por ello, elegir el sustrato adecuado para cada tipo de planta es esencial para conseguir su correcto crecimiento y desarrollo.
Existen muchos tipos de sustratos, elaborados a partir de diferentes materiales y con distintas finalidades. Los más comunes son el sustrato universal, el sustrato para cactus, el sustrato para plantas acidófilas y el sustrato para orquídeas.
El sustrato universal es el más utilizado, ya que se adapta a la mayoría de plantas y es fácilmente encontrable en cualquier centro de jardinería. Está compuesto por una mezcla de turba, arena y abono orgánico, que proporciona una buena cantidad de nutrientes y retiene bien la humedad.
El sustrato para cactus, en cambio, está elaborado a partir de arena y tierra volcánica, lo que le confiere una gran capacidad para drenar el agua. Es ideal para plantas que necesitan un sustrato muy seco, como los cactus y las suculentas.
El sustrato para plantas acidófilas está diseñado para aquellas plantas que necesitan un pH bajo del suelo, como pueden ser las campanillas o los rododendros. Está compuesto por una mezcla de turba y tierra de brezo, lo que le proporciona una acidez adecuada.
Por último, el sustrato para orquídeas es muy particular, ya que estas plantas no necesitan tierra para crecer. Este sustrato está compuesto por una mezcla de corteza de pino y carbón vegetal, lo que proporciona una adecuada circulación del aire y el agua.
A la hora de elegir el sustrato adecuado para nuestras plantas, hay que tener en cuenta varios factores. En primer lugar, debemos conocer las necesidades específicas de cada planta en cuanto a pH, necesidades de agua y nutrientes. En función de estas exigencias, elegiremos un sustrato u otro.
Otro factor a considerar es el tipo de cultivo que vamos a realizar. Si queremos cultivar en maceta, es recomendable utilizar sustratos que contengan agentes que mejoren la capacidad de retención de agua, como la perlita o la vermiculita. Por otro lado, si vamos a cultivar en un jardín, es importante utilizar sustratos que mantengan una buena circulación del aire y retengan bien la humedad.
También es recomendable utilizar sustratos de calidad, que contengan una cantidad equilibrada de nutrientes y no contengan elementos perjudiciales para las plantas. Hay que tener en cuenta que, en el caso de las plantas cultivadas en maceta, necesitarán un aporte extra de nutrientes en forma de abono orgánico o fertilizante.
En el caso de que queramos elaborar nuestro propio sustrato, es importante conocer las proporciones adecuadas de los diferentes materiales. Una mezcla equilibrada debería contener un 50% de turba, un 25% de arena y un 25% de abono orgánico.
Para elaborar el sustrato, lo primero que debemos hacer es mezclar bien todos los elementos hasta que queden homogéneos. Después, podemos añadir algún agente que ayude a mantener la humedad, como la perlita o el vermiculita. Es importante que la mezcla quede bien aireada y no demasiado compacta.
Elegir el sustrato adecuado es fundamental para conseguir un correcto crecimiento y desarrollo de nuestras plantas. Conocer las necesidades específicas de cada especie y su modo de cultivo es esencial para seleccionar el sustrato más adecuado. Además, debemos tener en cuenta que los sustratos de calidad proporcionarán a nuestras plantas los nutrientes necesarios y les ayudarán a resistir mejor las enfermedades y plagas.